LA ESCUELA TRADICIONAL Y LO VIRTUAL

Hola compañeras y compañeros.

Me excusan que los haya dejado solos por unos meses. Este cuento de la "joda educativa" y más cuando ya se acerca el retiro forzoso, absorbe más tiempo del presupuestado. Traigo hoy a su  pedagógico juicio, este "polvo" que espero sea punto de partida para un debate al cual no le podemos "escurrir el bulto"; pues de lo contrario se seguirá diciendo que los maestros, igual que los politiqueros, sufrimos de "audiotesticulítis" (que oímos; pero que nos hacemos los gûevones)

LA ESCUELA TRADICIONAL Y LO VIRTUAL

Un forcejeo que tiene todo que ver con nosotros

La actual escuela; la misma de nuestros tatarabuelos, abuelos, padres e hijos; esa que se instituyó con el objetivo fundamental de perpetuar, la obediencia y la sumisión al rey o a sus representantes, y que ha resistido tercamente desde entonces los tremendas arremetidas de lo político,  lo científico y lo tecnológico en contra de sus infranqueables muros y de sus  sacrosantos y cristalizados procesos de aula, se viene enfrentando desde hace unos veinte o treinta años a uno de sus más peligrosos y poderosos  adversarios; lo virtual, y a pesar de que hasta ahora el conteo está a favor del maestrocentrismo, la pelea está como para alquilar balcón pues son muchos los factores en juego.

Una mirada retrospectiva nos dice claramente que los únicos elementos tecnológicos que se pueden dar el lujo de haber permeado medianamente la escuela, son la grabadora de cassettes, el televisor y el marcador; pero la nuevas TIC con su ejército de componentes (ordenadores, celulares, tablets, kindles, etc) apoyados por el internet y sus múltiples opciones (redes sociales, wikis, blogs, chats, video conferencias, mundos virtuales, espacios en 3D y la aparición de la web 2.0 con su nube de aplicaciones) todo dirigido a favorecer la personalización y a lograr un verdadero aprendizaje significativo con el cual cada niña o niño construya su propio conocimiento, hacen tambalear mi creencia en la eterna sostenibilidad de la todopoderosa estructura escolar y me proyectan una luz de esperanza en el sentido de poder ver alguna vez un cambio de perspectiva que suponga pasar de un triste usuario consumidor de contenidos a un alegre usuario creador y transformador de la realidad que lo circunda.

No quiero que se interprete lo anterior como que  deseo de corazón que , la escuela tradicional, en lo que se refiere a los tramos obligatorios, se virtualice ya, hasta el límite de que desaparezcan los centros escolares tal y como hoy los conocemos y que todas las relaciones entre su comunidad educativa se produzcan de forma exclusivamente virtual, (lo que parece inevitable). Sería deseable que el incremento en el uso de la tecnología pueda virtualizar una parte de las relaciones que tienen lugar en el medio escolar, sustituyendo gradual; pero voluntariamente, muchas actividades que siempre se han hecho de una manera convencional por otras más virtuales. En ese sentido, cabe decir que el término escuela virtual representaría aquí la escuela convencional que, mediante el uso de los recursos tecnológicos disponibles, ha evolucionado hacia un grado notable de virtualización de su actividad docente, administrativa, etc.

Un tentativo listado de algunas ventajas y desventajas de lo virtual, que se ha recogido de “Chats pedagógicos” y que ojalá sea corregido y aumentado por usted amable lector, nos puede ir aterrizando suavemente en el “ojo del huracán” de la controversia que ya nos lleva bastante tramo de ventaja; pero a la cual podemos entrar sin temor de que nadie nos vaya a mirar como “rara avis”.

Ventajas para el usuario

·         Se siente personalizado en el trato con el profesor y sus compañeros.

·         Puede adaptar el estudio a su horario personal.

·         Puede realizar sus participaciones de forma meditada gracias a la posibilidad de trabajar

·         On- line y off- line.

·         Podrá seguir el ritmo de trabajo marcado por el profesor y por sus compañeros de curso.

·         El alumno tiene un papel activo, que no se limita a recibir información sino que forma parte de su propia formación.

·         Todos los alumnos tienen acceso a la enseñanza, no viéndose perjudicados aquellos que no pueden acudir periódicamente a clase por motivos como el trabajo, la distancia, etc...

·         Existe feed-back de información, de manera que el profesor conoce si el alumno responde al método y alcanza los objetivos fijados inicialmente.

·         Se beneficia de las ventajas de los distintos métodos de enseñanza y medios didácticos tradicionales, evitando los inconvenientes de los mismos.

Desventajas para el usuario.

• El mal uso que se pueda hacer del, o de los recursos
• La pasividad del sujeto frente a este medio, pues se percibe como un "medio fácil".
• Inexistencia de estructura pedagógica en la información y multimedia; Tecnófobos y tecnófilos.
• Dificultades organizativas, problemas técnicos y altos costos de mantenimiento.
• La tendencia a trabajar cualquier aspecto o contenido de forma virtual, dejando de lado el uso de medios más sencillos como el retroproyector
• Falta de una estructura pedagógica adecuada, diseñada intencionalmente teniendo en cuenta los procesos cognitivos y las formas de aprender de los estudiantes. 

Lo relacionado con el hecho de que La educación virtual puede ser una alternativa considerablemente más barata que la enseñanza presencial y que se  necesitan menos instructores, menos aulas de clase, y menos personal administrativo para atender un mayor número de alumnos, no sé si colocarlo entra las ventajas o las desventajas; pero si intuyo que es uno de los factores que más está incidiendo en retrasar la triunfal entrada de lo virtual en las escuelas.

Como lo expresé al inicio de este corto ensayo; la pelea está como para alquilar balcón y lo deseable es que no nos quedemos como meros espectadores de un proceso que tiene todo que ver con nosotros como padres o como docentes. Reitero el ofrecimiento de este su espacio, para que expresen sus puntos de vista; a favor o en contra; pero muy respetuosos

G. López